Llegó el tan esperado
“Cuadernillo 18”. ¡¡¡¡¡El último!!!!! Sí, es el último (por este año). ¡¡¡Por
fin!!! Dirán ustedes
Quiero agradecerles por la
dedicación que pusieron al resolver todo lo que en ellos había.
Algunas cosas fáciles, otras
no tanto. Pero a pesar de todo las resolvieron.
Desde nuestro humilde lugar y
con todo el amor que sentimos por ustedes, tratamos de que siguieran
aprendiendo, de un modo diferente, raro…
Juntos volamos con nuestra
imaginación, soñamos, reímos con todos las cuentos, limericks, leyendas y canciones que disfrutamos.
Hicimos cuentas. ¡¡¡¡Muchas
cuentas!!!! Sumas, restas, multiplicaciones, divisiones.
Y problemas ¡Qué problema!
Cada uno resolviéndolo cómo quisiera,
cómo le resultara más fácil. Eligiendo
su propio camino, su propia estrategia. Siempre escuchando y respetando la opinión
de su compañero.
Recorrimos virtualmente de
norte a sur nuestro país. Conocimos sus diferentes paisajes, sus provincias con
sus capitales. Nuestra forma de gobierno, nuestros derechos y obligaciones.
Aprendimos a convivir siempre con respeto hacia el otro. Hasta caminamos con
sus zapatos…
Recorrimos también nuestro
cuerpo, conocimos sus aparatos, aprendimos a cuidarnos, a comer sano, para
crecer fuertes.
También jugamos a ser
científicos, cocineros, inventores…
Gracias familias por
trabajar codo a codo con nosotras, las seños. Sin ustedes esto no hubiese sido
posible.
Chau, chau.
Hasta el próximo
cuadernillo…
Y colorín colorado esta
historia no ha terminado.
Un beso grande.
Seño Myriam